martes

Pie de página por Luisa Fernanda Lindo

¿Qué es el vacío sino la ausencia de un cuerpo? Así como para De Certau, el espacio se construye por medio del desplazamiento del caminante, Nani Cárdenas se enfrenta con la galería y empieza a construir su espacio por medio del tejido realizado con hilos telefónicos y cables eléctricos. El elemento crea el espacio: un cuaderno con sumas es uno de cuentas; uno con versos es una bitácora. Al aparecer un dibujo, toma nombre: Cuaderno de dibujo.
Para Cárdenas, el cuaderno de dibujo se convierte en el punto de fuga, por el cual reafirma una manera de pasar la vida. La inmediatez (el dibujo) es trasladada al medio (el cuaderno); luego, la artista, ubicándose ya en la galería, hace de ese medio el conducto principal de donde derivan tres líneas que abarcan el espacio: “Hojas sueltas (bordados)”, “Apuntes a lápiz (hilos telefónicos)” y “Tinta negra (cable de acometida)”. De esta manera, espacio y tiempo confluyen en el tránsito de las líneas, que marcan a la vez al cuerpo -bordado, anudado, tejido y soldado-.
Lo dado (el material) y lo nuevo (el espacio) se enfrentan en un diálogo ininterrumpido, que se manifiesta principalmente en “Apuntes a lápiz”; en donde la finura del cable telefónico que compone cada pieza, asemeja los trazos rápidos de bocetos. Así -entre veladuras desveladas- tierra y aire se concentran en la atmósfera de los cuerpos danzantes, donde la propia carne se torna la proyección de una sombra, dando la sensación de desvanecerse en el aire -mientras los pasos de los visitantes, que van haciendo y deshaciendo trazos sobre un suelo de arena, reconstruyen la escena de la artista en su encuentro con el espacio vacío-.
De la fragilidad de la danza y lo efímero del trazo andado, van apareciendo rostros, historias mínimas, que entran en una red conversacional; haciendo de la hoja en blanco puntos y líneas que se interceptan, anudan y desanudan, en un lienzo (des)bordado, para finalmente volcarse en un discurso fragmentado. Así, el dibujo recosido se vuelve desesperado en el intento de la artista de querer fijar con sus manos lo intangible. Hay, en estas “Hojas sueltas”, una pulsión de búsqueda y encuentro que hace que el deseo se vaya dilatando en trazos más gruesos que teje, entreteje, suelda y amolda, hasta que el material se le escapa de las manos.
En este desborde, en este chorrear, es que aparece “Tinta negra”, siendo su material el conducto por donde fluye la tensión de tres guerreros – esculturas sólidas de grandes proporciones-; mientras en un rincón, casi replegándose, un flujo de cables que penden desde lo alto, rompen en un tejido caótico, haciendo contrapunto con el espacio marcial.
Cuaderno de dibujo constituye no sólo la prolongación de las notas de Nani Cárdenas, sino que nos invita a caminar por el mundo descifrando formas, leer lo nuevo en lo ya conocido y, mezclarse con las sombras.
Marzo, 2009

No hay comentarios: